
Un golazo de Paulinho en el 100’ de la prórroga fue suficiente para que Palmeiras, con Estevao y Vitor Roque en el once inicial, se llevara el duelo brasileño de octavos y se convirtiera, con todo merecimiento, en el primer cuartofinalista del Mundial de Clubes. El Verdao se tomó así su particular revancha ante Botafogo, actual campeón del Brasileirao y gran revelación de la primera fase, dejando en el camino al Atlético y derrotando al PSG del Triplete. El partidazo del ex Valladolid John Victor bajo palos no fue suficiente para los de Renato Paiva, que se marchan de Estados Unidos con la cabeza alta.
El Fogao supo llevar el partido a su terreno, atando en corto a Estevao y Mauricio y teniendo, incluso, el 0-1 en un par de acercamientos al filo del descanso. La más clara de un primer tiempo infame, eso sí, la tuvo Richard Ríos, también en las postrimerías. El colombiano fue el primero en poner a prueba a John Victor, especialmente brillante tras el paso por vestuarios.
Estevao dejó, por fin, muestras de su infinita calidad, pero se topó hasta en dos ocasiones con el el gigantón de Diadema (1,97 m). Y justo cuando mejor estaba ‘Messinho’, Abel Ferreira optó por retirarlo tanto a él como a Vitor Roque, bastante más desacertado. Una decisión cuanto menos sorprendente que devolvió al terreno de juego el tedio, solo interrumpido por un testarazo a bocajarro de Mauricio que mandó a córner John Victor, quién sino.
Ya en el tiempo extra, Paulinho se vistió de Estevao y firmó un golazo que vale un billete a cuartos. Arrancó desde la derecha, dejó atrás a dos rivales y se alió con la diosa Fortuna, puesto que Barboza tocó lo justo para hacer que su disparo de zurda fuera imposible para John Victor, completamente hundido. Botafogo lo intentó hasta el final, llegando a tener el 1-1 después de la expulsión de Gustavo Gómez, pero será Palmeiras el que vuelva el miércoles al Lincoln Financial Field de Filadelfia (03.00 h.). Ahí le esperarán Chelsea o Benfica.