
El Atlético de Madrid quedó eliminado este lunes del Mundial de Clubes de manera prematura. A pesar de sumar seis puntos de nueve posibles, el conjunto dirigido por el Cholo Simeone se queda a las puertas de la ronda de octavos de final. El final amargo llegó incluso tras el logro de la victoria en el campeonato ante el Botafogo (1-0), aunque el solitario tanto de Griezmann fue insuficiente para la ristra de goles necesarias para avanzar en el curso.
El profundo análisis que requiere la pronta eliminación de la escuadra colchonero repare en el rendimiento de futbolistas como Julián Álvarez, quien no estrenó su cuenta particular, la falta de talento colectivo o las sensaciones de que en ningún momento el equipo estuvo cerca de tocar la siguiente ronda. En lo deportivo, el Atlético desechó una oportunidad espléndida para aupar su nombre en una competición de prestigio después de los varapalos que se sucedieron durante la pasada campaña en las distintas competiciones. Una ocasión desperdiciada también de afrontar el curso 2025/26 con el ánimo por las nubes que supone además la pérdida de un suculento premio económico para la entidad.
Se embolsará el Atlético de Madrid un total de 24 millones de euros, de los que 20 millones de euros son por participar en el torneo mientras que los otros cuatro millones restantes llegaron de la mano de cada una de las dos victorias ante el Seattle Sounders y ante el Botafogo. Una cantidad, desvelada por el diario Marca, que responde a los criterios deportivos y comerciales asegurados tan solo por participar, pero que supone un montante insuficiente dado que de llegar a cuartos de final las cifras ascenderían a una cantidad golosa que rondaría en torno a los cincuenta millones de euros.
De hecho, los rojiblancos incumplen así sus expectativas deportivas y económicas, dado que presupuestaron alcanzar la ronda de cuartos de final. Deja de ingresar de este modo el Atlético de Madrid los 6’5 millones de euros que supondría llegar a octavos de final y los 11 millones de euros que podría acarrear el pase a la ronda de cuartos de final, la antepenúltima eliminatoria del Mundial de Clubes.
Una eliminación que rompe con los pronósticos previos acerca del devenir del Atlético de Madrid y que pone en guardia a clubes como el Chelsea, el Inter de Milán o el Borussia Dortmund, quienes aún pueden caer eliminados del campeonato.